- Tengo miedo de perder a mi amiga y no tener a nadie con quien hablar.
- Los padres de Max dicen que soy un «amigo imaginario».
- Si existo es porque Max cree en mí.
- Necesito que Max siga pensando en mí. Que siga creyendo en mí. No quiero que me pase eso de «la distancia es el olvido»
- Los adultos a veces responden a las preguntas no contestándolas.
- Es muy extraño ser un amigo imaginario. No te asfixias, ni enfermas, ni te rompes la cabeza de una caída y tampoco pillas neumonías. Lo único que puede matarte es que una persona no crea en ti.
- Siento que seguimos juntos, aunque estemos separados.
- Quiero a mi amigo y soy el único que puede hacer algo por él.
- No puedo imaginar que no nos veamos nunca más. La quiero tanto...
- Te prometo que no desapareceré.
- Sé que me ves, pero en realidad no estoy aquí. Porque soy imaginario. Yo no puedo ayudarte, Max. Tienes que ayudarte a ti mismo.
- ¿Eres real? Dime la verdad.
- Es como si hubiera un muro invisible entre los dos.
- John está atrapado en un cuerpo que no puede despertar, y Oswald es sus ojos y sus oídos. Su ventana al mundo.
- De pronto Oswald hace algo inimaginable: se acerca a mí y me abraza.
- Solo eso ya es mucho más de lo que he conseguido hacer en toda mi vida.
- Sin él, no estaría aquí. Pero tengo miedo, y me siento culpable por tener miedo.
- Atravieso la puerta, sabiendo que a veces lo más difícil es hacer lo que uno debe.
- Este trabajo me ha permitido recordar que hay cosas buenas en el mundo.
- Quiero hacer algo con mi vida y no quedarme esperando para luego tener que lamentarme.
- Quiero despedirme y también decirle lo mucho que la quiero, pero no sé cómo. Espero que estas lágrimas lo digan por mí.
- Hacer lo correcto suele ser lo más difícil.
- ¿Qué tiene de bueno dormir?
- —Pues que cuando estás durmiendo, sueñas.
- —¿Eso quiere decir que no somos de verdad?
- —No —respondo—. Solo quiere decir que pertenecemos a una realidad distinta. Una realidad que los mayores no entienden, por eso dicen que somos imaginarios.
- Ojalá pudiera volver a verte.
- —Podrás salvarlo cuando hayas podido salvarte a ti mismo.
- —No tengas miedo —dice Dee.
- Para salir de casa cada día y ser tú mismo cuando a nadie le gusta como eres hay que ser supervaliente.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario